Lima: la capital gastronómica de América Latina

En Lima, el restaurante Osaka es uno de los mejores. Por ello, durante su viaje, no puede pasar sin visitarlo. Si no sabe qué elegir, puede preguntarles a sus cocineros qué plato es el más popular ese día. Casi todos los habituales lo hacen antes de pedir algo. Existe la opción de probar recetas deliciosas en la azotea, con vistas a la ciudad. El ceviche es el estandarte de la cocina peruana, el primer bocado que es muy posible que pruebe en el Osaka. Se hace con pescado crudo (con variantes de gambas y otros mariscos), marinado abundantemente en zumo de lima y pimienta. Según la receta tradicional, se sirve con cebolla roja fresca, batata hervida y granos de maíz gigante. El líquido que produce esta mezcla tiene su propio nombre: leche de tigre. Incluso puede pedirse por separado, como bebida.

Los amantes de la cocina asiática, con sus infinitas combinaciones de sabores dulces y salados, tienen que probar la chifa. La chifa es la cocina de los inmigrantes de los cantones del sudeste chino, la cual ha incorporado ciertas influencias peruanas. En casi todos los restaurantes verá el plato más típico de la cocina chifa, el lomo saltado, ternera cocinada a fuego lento con patatas fritas, pimientos amarillos, cebollas y tomates, y sazonada con salsa de soja. Puede probarlo en NANKA, un restaurante que ha ganado numerosos y prestigiosos premios y que ofrece platos de las cocinas peruana y china. Sus chefs preparan unas recetas de verdura excelentes, gran parte de las cuales se hacen al horno. El menú incluye varias opciones de flan, así como interesantes postres de fruta fresca. Junto a las recetas tradicionales peruanas, encontrará también en su menú platos mediterráneos y latinoamericanos.

Este podría ser un típico almuerzo peruano casero: carne, arroz, patatas o un guiso con cualquier legumbre; en general, una comida altamente calórica. Siempre creímos que la cocina peruana era increíblemente exótica, pero cuando llegamos aquí nos dimos cuenta de que los peruanos comen lo mismo que nosotros: arroz, patatas, carne, maíz y pollo. Le aconsejo que prueben el arroz con pato o pollo; en ocasiones, el pollo se cuece con cerveza y adquiere un gusto muy interesante. Tanto la papa rellena como la causa rellena incluyen patata, solo que en el primer caso es más bien un pastel de puré de patata y carne, y el segundo son láminas de patata en capas con carne y aguacate. Pruebe la carapulcra: pollo o cerdo con patatas, chile y cacahuetes, muy sabroso. No se olvide del ají de gallina, pollo con pimientos amarillos y una salsa muy cremosa. Sin duda, el mejor ají de gallina es el del Café Museo Larco. Creíamos que no podía haber buenos restaurantes cerca o incluso dentro de los lugares más turísticos, pero no es cierto. Un lugar muy pintoresco, rodeado de historia y con una estupenda cocina peruana: ¿qué más puede pedir?

La cocina peruana es una de las más variadas del mundo, con cientos de platos nacionales. Su diversidad se debe a su peculiar localización geográfica y a sus numerosos grupos étnicos. La heredera del imperio inca siempre ha sido un cruce de distintas culturas, una combinación de tradiciones locales, españolas, francesas, italianas, chinas e indias. Perú es la patria originaria de la patata: todas las variedades de patata que existen en el mundo tienen raíces peruanas. La base culinaria de la cocina peruana incluye un número ingente de variedades de patatas. La patata es el ingrediente básico de un plato como la causa: una cama de puré de patata, verduras y lo que sea. ¡Pásese por Astrid y Gastón Casa Moreyra y pruébela! Enamorado con toda su alma de la cocina, las tradiciones y la herencia peruanas, el chef Gastón Acurio y su esposa fundaron este restaurante que lleva sus nombres en una casita del distrito de Miraflores de la capital Lima. Después de 20 años, tras numerosos premios y reconocimientos en los cinco continentes, Astrid y Gastón se mudaron a una amplia propiedad del siglo XVII con su jardín y su patio. La misión principal de este restaurante es mostrar todo lo mejor del Perú, y el objetivo del chef es promocionar la cocina y la historia de este país por todo el mundo.

El pimiento rojo picante también tiene su origen en Perú y en México, desde donde se extendió al resto del mundo. En Perú, el pimiento picante se utiliza muy a menudo, añadiéndolo con generosidad a muchos platos. El rocoto relleno es un pimiento rojo relleno de ternera asada con especias, espolvoreado con queso fresco y horneado en una salsa cremosa. Casero y normalmente lleno, El Bodegón es un sitio estupendo para probar platos criollos: causa, pimientos rellenos y postres limeños. Cuando la cocina es igual a cultura y amor, su calidad está garantizada tanto en los restaurantes más exclusivos como en los puestos de comida callejeros.

La cocina peruana, desde las cevicherías callejeras a los restaurantes modernos, es una celebración perfecta del sabor. Y tanto por cinco como por ciento cincuenta dólares le van a dar un plato preparado a la perfección (bueno, o veinticinco). Y con ello, el concepto de que lo “bajo” y lo “alto” pueden convivir el uno junto al otro. Y al final, usted a disfrutar.